Hoy sabemos dónde está el epicentro de ese movimiento: el desierto de Sonora, la puerta de entrada a Arizona y al american dream. Marion N., hondureño en ruta hacia Estados Unidos, se enteró de la aprehensión del El Mayo Zambada mientras esperaba el tren en Chiapas. Su paso lento se debe a que busca dinero en cada parada para no llegar a Sonora sin la cuota que le van a exigir. Nadie lo dijo en voz alta, pero todos supieron que el origen de esa atrocidad estaba en el mando de El Mayo Zambada. “Hay células criminales que no saben vivir sin El Mayo Zambada.


Source:   Milenio
August 07, 2024 17:41 UTC